Hoy, como tantos otros días, sentí la iluminación, pero luego la desmemoria.
Es que sabes que encuentro las palabras precisas al hablar, pero son de esas que se me olvidan una vez dichas.
Si vives tan espectante del futuro, piensas, actuas y vives pendiente sólo de él, dejas de aprovechar el presente, el momento, el día a día; qué terrible sería vivir así...
Culpas a la incertidumbre por tu actuar, pero es un círculo vicioso, ¿no lo ves?
Nadie es capaz de asegurarte la estabilidad, nadie, ni siquiera tú. El sentirse confiado de ser dueño de sí mismo y que los demás también lo son, sólo lleva a la decepción. ¿Acaso no es más dolorosa la decepción que la inseguridad?
.
4 comentarios:
la decepción parece ser más dolorosa...una decepción trasciende en el tiempo, mientras que la inseguridad depende mucho del contexto en el que estés viviendo.
Tal vés en alguna oportunidad, una persona determinada fue segura, de lo que tenía, de lo que era y de como actuaba, sin embargo, una situación en particular pudo haber hecho cambiar mucho de eso que era...una decepción pudo haberla hecho insegura...
8 de noviembre de 2009 12:52
Claro, por eso mismo la decepción es más terrible. Tiene y acarrea más consecuencias.
(borre el comentario anterior por que salió cortado¬¬ )
Tus palabras calaron precisas en lo que me ha pasado últimamente, aunque muchas veces antes ya lo habia asumido asi, y otra vez volver al error; pero como siempre me pasa, hay algo que me hace ver que el presente es siempre lo más importante, y que por cierto que por la casualidad llegué aquí, (si es que existe) hay cosas que me hacen recordar cúan equivocado se está en vivir de esa manera.
decepcion e inseguridad, dolorosa mezcla que a veces es necesaria para hacernos ver que nunca se terminará de aprender.
Por cierto, me gusta como escribes, y lo que comunicas, una extraña esencia evaporan tus letras.
Publicar un comentario